Con una fractura de hueso facial y contusiones de gravedad producto de perdigones disparados por carabineros, terminó el menor Luis Marileo (17 años); mientras que el hijo del lonko de la comunidad José Guiñón, Jorge Marimán (18 años), recibió tres balazos en su pierna izquierda en un brutal allanamiento realizado por fuerzas especiales de carabineros en esta comunidad. En tanto, en la declaración prestada por el lonko en las afueras del hospital de Angol, señaló que su hijo luego de ser baleado, fue golpeado con un arma hasta fracturarle el antebrazo derecho.
Heridos
Según lo explicado por el preso politico mapuche Jaime Marileo, el terrible hecho ocurrió luego de que la comunidad José Guiñón estuviera próxima a salir rumbo a la cárcel de Angol en donde se realizaba la celebración del Wetripantu junto al werken José Huenchunao, preso en este recinto penal. El hecho ocurrió hoy( sabado 21/06) a eso de las 13:30 horas. "Estabamos esperando que nos viniera a buscar el bus cuando llegaron policías de civiles a controlarnos e intimidarnos, luego fuimos a buscar mas gente a la comunidad vecina de Tricauco y cuando pasamos de vuelta ya habían allanado la casa del lonko y los peñis estaban heridos sangrando en el suelo". Así también, otros comuneros fueron heridos con perdigones de goma quedando con lesiones menos graves.
Detenidos
A raíz de este terrible hecho, los comuneros trasladaron inmediatamente a los jóvenes mapuche al hospital de Angol donde fueron atendidos de urgencia por el doctor Rodolfo Cortés, quien dos horas más tarde señaló que el comunero José Marimán poseía varios balazos que "probablemente eran perdigones de plomo ya que no hemos podido extraérselos". Por otro lado, como es de imaginarse, carabineros de Chile negó haber cometido el terrible allanamiento justificándose de que buscaban un animal perdido y que supuestamente los comuneros los habían emboscado y agredido. Es así como los jovenes quedaran detenidos por orden de la fiscalía militar y deberán prestar declaración en las próximas horas.
Finalmente, cabe recalcar el evidente estado de sitio vivido en la comunidad ya que no se les permitía a los comuneros salir de sus viviendas a costa de la desmedida violencia y brutal represión aplicada por el Estado chileno que en su "seudo-democracia" aún continúa violando los derechos del pueblo nación Mapuche.
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